Versionar una gran canción es todo un riesgo porque las posibilidades de darse la hostia son enormes. Pero el que no llora no mama y el que no arriesga es porque no tiene nada que ofrecer.
Así que Michael, si estás escuchando esta versión de tu grandiosa Billie Jean, puedes estar tranquilo porque Aloe Blacc and The Grand Scheme han bordado una de las canciones más difíciles de (a)bordar.
(Gracias a mi brasileira Clarissa por descubrirme semejante tesoro).