Un piso con vistas a las obras del AVE en la zona de Navas, Barcelona. Una tarde cualquiera, de esas que se acuestan con el primero que pasa o con el segundo si el primero eras tú. Y cuatro guionistas que, aburridos de hacer chistes sobre los ya conocidos gustos sexuales del Papa y hartos de que sólo se les valore por sus cuerpos, tienen de repente la mejor idea del siglo desde que alguien decidiera darle un Ondas a Jorge Javier Vázquez.
Sabían que el éxito de ventas del nuevo producto les quitaría para siempre de trabajar o de tener que empezar a hacerlo. Para llevar a cabo la idea sólo hacía falta desvariar durante quince minutos, un poco de Don Simón reserva del chino de abajo, invocar al espíritu de Pepe Navarro o de otra joven promesa, y alguien que supiese encender una cámara de vídeo de última generación, de esas que tienen para cintas con dos caras. Sí, hombre, de las que les salen drops si suena un móvil en un radio inferior a cuatro kilómetros. Pues de esas.
¿Estás cansada de que tu pareja te deje el baño perdido?
¿Tan difícil es apuntar bien a la taza?
¡Llega MIERDER 3000!
Hace ya un par de añitos de aquella tarde en que me junté para comer con tres buenos colegas mucho más graciosos que yo y acabamos haciendo esta pollada de sketch que no pasará a los anales de ninguna moza dispuesta. Me lo hicieron pasar de putísima madre (aunque comimos poco y salió caro) hasta que empezaron a mirarme demasiado el calcetín que llevaba en el paquete. Ahí se enfrió la cosa un poco.
Hay veces que es bueno sacar cosas del fondo del armario y mostrarlas al gran público. Y esta es una de ellas. No hay vergüenza. ¿Pa’ qué?
Aprovecho para mandar un abrazo caluroso – ahora que tanto pega – a los verdaderos artífices de semejante oda al humor: Pablo Colau (el tío con el humor más cojo y dañino que conozco), Ferri López (no vuelves a ser la misma persona después de uno de sus monólogos) y Helio Valero (el hombre incansable que siempre está proponiendo acción). Saludaría también a su novia Marta, pero sospecho que es virtual.
Tan genial como cierto que funcionaría…