De Hard eight, Sidney a Boogie nights. De Magnolia a Punch-Drunk love. Y por supuesto There will be blood. En resumen: Paul Thomas Anderson. La potencia de lo crudo. La insoportable levedad del tener que ser.
Es difícil perdonarte si aún no conoces su todopoderosa filmografía. Todavía quedan meses para su nueva obra, pero The Master ya es obligatoria.