Media hora entre la carcajada y la lágrima. Ternísima entrevista a un tipo que merece toda mi admiración a pesar de ser familia (primo hermano y sin embargo amigo). Una conversación de lo más cálida entre dos personas que conectan y saben comunicar. No suele pasar casi nunca y mucho menos en cadenas de TV secuestradas por gobiernos que trabajan desde el odio. Y para una vez que pasa, habrá que disfrutarlo.