Anoche fotografié (sin que se diesen cuenta) a Andreu Buenafuente y Risto Mejide mientras les entrevistaban en las reposiciones de ‘Divendres’ (TV3) y ‘Tele-Monegal’ (L’Hospitalet TV) respectivamente. Hay madrugadas que me lo trago todo (o casi todo). Debería cenar más ligero, no sé..

A lo que iba:

En TV se dicen miles de palabras cada día que complementan a la verdadera protagonista: la imagen. Sin embargo son las palabras mal dichas las que se empeñan en convertir la TV en un lugar inhóspito para la imagen. Y luego está el público, que juzga la imagen con sus palabras. Y no sé vosotros, pero yo me niego a aceptar las palabras de quienes sentencian que ‘en la tele española sólo hay basura’.

Me niego en redondo a taparme los oídos ante la cantidad de cosas interesantes que dicen algunas personas en TV casi a diario.

Porque en TV unos van con los cristales limpios y la mirada de frente mientras otros usan lentes oscuras y desvían la mirada. Porque en TV la naturalidad de unos nos deja con la boca abierta mientras la pose de otros no nos deja cerrarla de tanto aburrimiento.

Porque en TV unos consiguen que nos acerquemos a escuchar mientras otros nos echan para atrás. Porque en TV unos vienen con la verdad de su trabajo por delante mientras otros vuelven para justificar la mentira del suyo. Porque en TV unos trabajan para la palabra colectiva y otros para su imagen individual.

Yo voy con los primeros, con los que apuestan por la transparencia como el mejor camino para llegar a cualquier parte. Por eso, igual que Andreu, voy a imaginar (por ejemplo) que tengo un Ay!Phone que sirve para hacer zapping cuando salen los otros contando sus movidas.