Siempre podré contar que mi primer premio físico fue en Andalucía y de color rosa (chillón, Jack Torrance mediante). Lo más hermoso de la foto, sin lugar a dudas, es mi hermana Nazareth y su ilusión, que es mi premio más valioso y auténtico.
Gracias a ella por recogerlo. Y a todos los que tienen la culpa de esto. Ellos ya saben quienes son.
Sigo trabajando para estar algún día a vuestra altura.
Felicidades, mi vida!