Mi éxito con las mujeres es como el de un programa nocturno de La 2:
tengo el reconocimiento de cierta minoría y la audiencia es insignificante.
Así que envejezco mirando La 1.
Mi éxito con las mujeres es como el de un programa nocturno de La 2:
tengo el reconocimiento de cierta minoría y la audiencia es insignificante.
Así que envejezco mirando La 1.