BASADO EN HECHOS REALES: durante la madrugada del pasado viernes apareció esta placa en una calle de Sant Sadurní d’Anoia, un pequeño pueblo de la provincia de Barcelona. Al día siguiente un tuitero envió la foto al Ayuntamiento, que quitó la placa rápidamente.
Vale: no me han dado el Balón de Oro (puto marketing), pero ya he tenido una calle durante varias horas. UNA CALLE. Con su acera, sus casas, su gente paseando, sus cagadas de perro…
UNA CALLE en un pueblo catalán. Cuando se enteren en Jaén seguro que me ponen una plaza. AY NO, QUE NO SOY FACHA NI SANTO.