He vuelto al cine siete meses después. Sigue habiendo gente chalada que mira más la pantalla del móvil que la película, ancianos que se explican en voz alta lo que está pasando y jóvenes que se ponen y se quitan la mascarilla porque tienen el poder de ver dónde y cuándo pasa el virus.

Sobre lo importante: o a Nolan se le ha ido la cabeza por completo o es un genio adelantado a nuestro tiempo que llega donde a otros sólo sólo nos alcanza con la risa nerviosa.

Con TENET me lo he pasado muy bien a ratos, he desconectado y conectado varias veces creyendo que me había encontrado y luego perdiéndome otra vez, aunque no estoy seguro si en realidad me he perdido alguna vez o si me he llegado a encontrar en algún momento.

He gozado como un chiquillo con el montaje, la realización, Kenneth Branagh y cuatro cosas más, pero he conectado poco con la historia y los diálogos. En resumidas cuentas: viva el cine, id al cine, viva Nolan, id a Nolan. La vida es corta como para ir renunciando a sus regalos.